Estado de la suspensión y las ruedas

Los profesionales de Turismos La Raza, Volvo en Sevilla, resumen en este post la relación entre el sistema de suspensión y el estado de los neumáticos

Son muchos los conductores de vehículos Volvo que desconocen el interior de su coche y los sistemas que hacen posible un correcto funcionamiento del mismo. La suspensión es uno de esos complejos engranajes que conectan el chasis con las ruedas y permiten que el movimiento del vehículo sea correcto a pesar de las irregularidades del terreno por el que se circula.

Con el firme propósito de mantener siempre el contacto del coche con el suelo, la suspensión debe estar siempre en un estado óptimo de mantenimiento. Estabilidad y seguridad dependen en gran parte de este sistema. En el caso de una suspensión en mal estado, además de ser la causa de más del 20% de las ITV desfavorables, los problemas que pueden empezar a surgir van desde un desgaste irregular de los neumáticos a frenadas anómalas o algo tan grave como una salida de pista que puede terminar en accidente.

La importancia de tener bien la suspensión del coche

En la suspensión de un coche intervienen dos elementos fundamentales: el muelle y el amortiguador.  Y su funcionamiento aunque sencillo de explicar es muy importante en la seguridad del vehículo y sus ocupantes. Cuando la rueda se encuentra con una irregularidad en el terreno, el muelle reacciona comprimiéndose, con lo cual absorbe la irregularidad.

Por su parte, el amortiguador tal y como su nombre expresa, mantiene al muelle dentro de unos límites de comprensión y expansión, y reduce el tiempo que tarda en deshacerse de la energía acumulada. Sin amortiguadores, el efecto sería similar a un balanceo del coche que no solo resultaría incómodo, sino peligroso.

Los amortiguadores contienen en su interior, o bien aceite, o gas. El movimiento del muelle provoca el trasvase de uno de estos fluidos de una cámara a la otra, de las dos que forman esta pieza. Este proceso, lento por naturaleza, detiene en parte la velocidad natural del muelle y ralentiza el rebote.

¿Por qué se desgasta la suspensión de un coche?

En primer lugar, el elemento que más suele acusar el paso del tiempo es el amortiguador. A mayor desgaste, más tiempo tarda en realizarse el intercambio de fluidos y por tanto comenzamos a notar inestabilidad al conducir sobre un terreno irregular o con baches. Pero la transición de nuevos a desgastados es tan progresiva que el conductor medio no va a notar la pérdida de las prestaciones.

Existen tres parámetros que podemos observar con respecto a la configuración de la amortiguación: la convergencia o divergencia; la caída y el avance. Todos se pueden ajustar en tu taller Volvo en Sevilla, de hecho, con el paso del tiempo es posible que uno o varios se desajusten. En otra entrada de nuestro blog te explicamos con detalle estos parámetros y cómo medirlos para mantener tu suspensión en perfectas condiciones.