La prueba de opacidad de la ITV es una de las más importantes, ya que es la que puede provocar que toda la revisión sea desfavorable. Es, de hecho, la principal causa de que los vehículos diesel no pasen la ITV.

La prueba de opacidad de la ITV se encarga de medir los humos que emite el tubo de escape, de tal forma que si supera un tope máximo, la prueba sale negativa. Los topes vienen definidos principalmente por la edad del vehículo.
Si el motor está en buen estado, puedes confiar en que la prueba probablemente salga positiva.
Cómo es la prueba de opacidad de la ITV
La prueba se realiza de la siguiente manera:
- Se enciende el motor y se lleva a la temperatura ideal de funcionamiento. Esto evita que el coche se estropee.
- Se comprueba que todos los sistemas auxiliares estén apagados.
- Se lleva el motor desde el ralentí hasta el corte de inyección, con una aceleración en vacío. Esto se repite mínimo 3 veces.
- A partir de los resultados del proceso anterior, se hace una media de emisiones. En caso de no estar claro, se repite el 3º paso las veces necesarias.
La prueba de opacidad es la única prueba de gases a la que se enfrenta el coche diésel. También se la conoce con el nombre de coeficiente de absorción. La peculiaridad de la misma es que, al limitarse a medir las emisiones del motor, no entra a valorar las razones por la que esto ocurre. Es decir, desde la ITV no te dirán la causa por la que no has pasado la prueba, solo que ha sido negativa.
Hay varias causas que pueden provocar una emisión excesiva, como puede ser un fallo en la válvula EGR o los filtros de partícula.
Límites de la prueba de opacidad de la ITV
Los límites genéricos que deben cumplir estos coches son:
- 0,7 para coche diesel Euro 6
- 1,7 para coche diesel Euro 4 y Euro 5.
- 2,5 para motor diésel atmosférico matriculado por primera vez antes del 1/07/08
- 3 para motor diésel sobrealimentado matriculado por primera vez antes del 1/07/08
Pero ojo, estos datos son meramente orientativos. Si tu coche posee una pegatina en la que el fabricante haya establecido su propio límite, será este el que deba cumplir. Es decir, si superas ese tope, pero no el genérico, seguirá siendo una prueba negativa. El fabricante posee preferencia sobre las pautas generales.
Comprobación de manipulación
Además, si el coche fue matriculado a partir del 2011 y es un modelo diésel Euro 5 o Euro 6, deberá pasar por el análisis de la centralita del puerto OBD. Esto se hace para comprobar si ha existido alguna manipulación o fallo en la memoria del mismo.
Con todo ello, se pretende verificar que no existan los resultados de los sistemas anticontaminación con el uso de filtros antipartículas, la recirculación de gases de escape o sistema SCR con Aditivo AdBlue.
¿Qué hago si no paso la prueba de opacidad de la ITV?
En caso de obtener una ITV desfavorable, te ayudamos a solucionarlo. Lo primero es buscar un taller de confianza donde puedan evaluar tu coche. Puedes contactar con nosotros si lo deseas. Recuerda: una ITV negativa solo te permite conducir para el taller o para la propia ITV.
En el taller revisarán si el motor está en buen estado. En caso de no estarlo, deberás dejar que el mecánico se encargue de ello. Si el motor parece estar bien, es posible que hagamos trayectos muy cortos por ciudad, subiendo rara vez el régimen del motor.
En ese caso, es posible que como mínimo tiene la EGR sucia y con bastante carbonilla por el colector de trasmisión y el filtro de partículas.
Para eliminarlas, lo que debemos hacer es poner aceite en el motor a temperatura de servicio y conducir unos 30 minutos a un régimen de ritmo alto.
Con todo esto, seguro que tu próxima prueba de opacidad en la ITV no te pilla por sorpresa. Recuerda, en Turismo la Raza estamos encantados de ayudarte a pasar la ITV, por lo que puedes contactar con nosotros.